Llevaba muchos años jugando con la idea de este espacio, un lugar para jugar libremente con mis sentimientos, mis sueños y mis palabras que saltan emocionadas porque finalmente las deje salir, jugar y danzar libremente en este espacio blanco y completamente nuevo para ellas.
Entre miedo, duelos, migraciones y nuevas creaciones en medio de un reinvento profesional me quiero regalar unas horas a la semana para escribir libremente lo que salga, un poco de poesía, de historia personal y de formas de manejar las emociones intensas de ésta, su servidora que se dedica a escuchar y acompañar a otr@s, pero que también se enamora, se equivoca, extraña, llora y grita en silencio.
He decidido hacer de este un templo de las palabras que mi alma mantiene en una especie de caldo emocional e irracional y que más allá de mis sesiones de psicoterapia y revisión constante, necesitan tener vida propia.
De este modo ¡Aquí estoy! escribiendo desde esta madrugada que esta vestida de dolor y fuerzas, de amores rotos y otros que sobreviven a todos los tiempos y silencios posibles. Sin rumbo claro, solo mis emociones hechas palabras para que no sigan dando vueltas como un torbellino que me desordena las noches y las madrugadas.
Bruja desnuda
traicionada
desgarrada
madrugada color olvido
con sabor a vino tinto
que corre más allá de mis ganas
muriendo cada mañana
¡Aquí estoy!
Ya nada me calla.
Poeta Saraí 
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